12.31.2006

New Year's Resolutions

Siendo hoy el último día del año, siento que es importante mirar hacia atrás para poder empezar el 2007 de una mejor manera y tomar las decisiones que le darán a mi vida un aire nuevo... HMMMM, ¡cómo no! Jajajajaja.

Tratar de hacer la lista de compromisos para el año nuevo nunca me ha servido de nada porque termino olvidándola o se me complican las cosas haciendo casi imposible cumplirla. Pero bueno, la de este que comienza sería de la siguiente manera, no perdamos las viejas costumbres:

- Hacer ejercicio, lo que implica sacar parte del sueldo y meterme a un gimnasio para obligarme a hacerlo. A la bicicleta estática de mi casa siempre le hago el quite.

- Comer saludablemente, debido a que como por antojos, nunca balanceadamente y rara vez las tres veces al día.

- Meterme a clases de algo, me gustaría retomar el francés que alguna vez el Refous me dejó como legado y así también aprovecho que hay más de uno a mi alrededor que lo está estudiando.

- Aprender a tomar y coger resistencia, ya me está aburriendo la fama de medio trago que tengo. Para esto necesitaré el entrenamiento del paisita que viene a trabajar conmigo en el proyecto Colciencias, él es un verdadero garganta 'e lata.

- Ser feliz y nunca traicionarme. Esta última queda como de relleno porque no se me ocurrió nada más, pero creo que es lo más importante que hay en mi lista.

¡Feliz Año para todos!

12.26.2006

Así fue mi Navidad

La Navidad ya pasó, pero me quedan los recuerdos como regalos de la vida que siempre me harán sonreir...

12.22.2006

Debajo del árbol

Espero que este año Santa aparezca porque, hasta el momento, debajo de mi árbol hay regalos para todos menos para mí. Inclusive ya hay tres para mi hermano y mi mamá. ¿Qué pasa Santa? ¿Niño Dios? ¿Acaso no fuí lo suficientemente buena este año como para merecer tus atenciones? *con el ojo aguado* Ahora recuerdo cuando era niña y la repartición de regalos duraba más de tres horas. Yo salía con una bolsa negra, de esas que se usan para la basura, llena de regalos. AAAAHHHH, ¡qué épocas aquellas! Épocas que nunca volverán porque: "la Navidad es para los niños", o ¿a quién no le han dicho eso para hacerlo sentir peor de mal?

Además que a mi familia, desde el año pasado, le dió por jugar al Amigo Secreto en Navidad, por aquello de la situación económica. Dijeron que era mejor gastarle a una sola persona un buen regalo en lugar de dividir el dinero entre muchos, ¿pero qué fue lo que pasó? Pues que se sigue dando el mismo tipo de regalo, no ha mejorado, jajajaja.

Así que acá estoy Niño Dios, esperando el regalo que me hará sonreir. *me seco las lágrimas y me quedo con una mirada de esperanza*

12.19.2006

Pets

Cat lover...?
Dog lover...?
I think I'm both!

12.14.2006

Del paraíso y aeropuertos del demonio

Mi estadía en Isla Margarita fue como estar en un aislado paraíso. Ya extraño el sol, el salado y frío mar, la fina arena, las verdes palmeras, las conchitas multicolores, las olas que trataron de ahogarme, los deliciosos cocteles que me tomé echada sobre alguna tumbona y hasta a los vendedores de cuanta maricadita se les ocurría hacer. Fue una semana bastante relajada, hizo falta alguna rumba pero bueno, mis papás terminaron por pegarme su actitud no-rumbera por esos días. Lo que me sorprendió fue la completa disposición de mi papá para probar cuánto coctel había y de repetir aquellos que nos encantaron como el Splash (amareto y jugo de naranja), el Orange Blossom (ron blanco, triple sec y jugo de naranja en granizado) y el Conga (jugo de piña y naranja con amareto y brandy). Finalmente, mi mamá sólo pensaba en que nos tomáramos 15 cocteles en nuestro último día, después de hacernos tan mala cara cada vez que nos veía todos prendos pidiendo más licor, que era casi siempre, heh.

Pero bueno, me echaron del paraíso y el regreso a Bogotá fue una pesadilla. Más de 12 horas en aeropuertos y aviones hicieron que llegara a casa con cara de zombie, zombie palenquero en chancla (por aquello del bronceado y la pinta calentana). Nos recogieron en el hotel a las 10pm, y terminamos saliendo del aeropuerto hacia las 3am (cuando la salida era a las 11:30pm). A las 4:30am empezamos el descenso pero el avión tuvo que subir de nuevo porque las condiciones del aeropuerto El Dorado no le permitían aterrizar. Obviamente, hasta que el capitán nos informó lo que pasaba, por mi cabeza pasaron muchas ideas fatalistas. Nos tocó llegar a Cali y allá, tras más de 2 horas de inmigración porque sólo había un oficial atendiendo, nos tocó esperar hasta las 10:30am (y eso que nos dijeron que nuestro vuelo salía a las 7:45am) hasta que, finalmente, llegó el avión de regreso. Llegué a mi casa antecitos del medio día, más cansada y con ganas de cama que nunca en mi vida. Conclusión: odio los vuelos charter y a Aerorepública.

Ahora, de vuelta a la vida real. No había podido escribir antes porque estaba dedicada a terminar el informe de avances que pide Colciencias. Hasta hoy lo terminé y ya estoy lista para hacer compras navideñas, prepararme para la cicloruta noctura, las novenas y demás actividades de este mes tan bacano.

12.02.2006

Yo solo sufro

Qué sufrimiento, mi vida es una pesada carga y no sé cómo la soporto. Es una completa tortura saber que mañana otra vez salgo de viaje al Caribe, y por segunda vez este año, ¡qué pesadilla! Me voy por otra semana, de domingo a domingo, ¿cómo haré para sobrevivirla? No creo que toda la comida y tragos ilimitados que me esperan logren compensar el daño que ocasionará en mi salud mental y física 7 días de no hacer nada. ¿Qué he hecho yo para merecer ésto? ¡No es justo! ¿Por qué tengo yo que andar toda acalorada y no tener más opción que meterme al mar o, en su defecto, a una piscina para refrescarme? ¿Cómo haré para que la fina arena, pegada a mí como si fuera una segunda capa de piel, no me moleste? Tendré que pasar las noches refugiada en cualquier bar para ahogar todas mis penas en cocteles de colores... Isla Margarita: ¡Allá voy!