Señales de que te estás volviendo viejo

Acá va mi Top 10, cada uno ha sido una experiencia vivida...

(10) Ya no eres ágil con los juegos de video.

(9) Cuando te vistes con tenis y saco con capotica, la gente pregunta que porqué la pinta tan deportiva.

(8) Ya no puedes comer lo mismo de antes porque terminas con la barriga hinchada o con dolor de cabeza.

(7) Sales a rumbear, si a caso, una vez al mes y prefieres más un arrunche con películas.

(6) Los porteros te dejan usar la entrada de empleados y no te mandan a la de estudiantes, como a los demás que vienen detrás tuyo en la fila.

(5) La gente nueva del trabajo te ha metido en el grupo que ellos llaman "Los Grandes".

(4) Tus jóvenes compañeros te evitan y, por ejemplo, sólo se escucha el eco de tu voz retumbando en las paredes cuando preguntas si alguien más quiere ir a almorzar.

(3) Te refieres a la gente menor que tú como "los jóvenes" y ya te parece que la juventud es irrespetuosa y que todos se echaron a perder.

(2) La gente se refiere a tí de las siguientes maneras: "Cuidado con la señora", "Qué se le ofrece, señora?, "Deje pasar a la señora", y demás frases del día a día siempre y cuando incluyan el sobrenombre "señora".

(1) Cada día te das cuenta de lo mucho que te estás pareciendo a tu mamá y que tu esfuerzo en evitarlo ha sido en vano.

UPDATE (15 octubre, 12:19pm): (1A) Te encuentras, no una, sino dos canas en tu cabeza.

Y se me hizo el milagrito...

Hoy es oficial, Laura forma parte del envidiado mesón de los laptops y creo que no podría estar más feliz... la felicidad es posible aún en los momentos de más incertidumbre y preocupación. Gracias a la jefe por el computador... y pensar que yo ni fui capaz de acordarme de ella en mis vacaciones y traerle aunque sea un chocolate sólo para ella.

Con te partirò

Porque hay veces que el corazón todavía se exalta con las letras de algunas canciones...

En días no productivos...

El hielo seco es divertido.

En el día del estudiante...

sobran las palabras cuando se tienen fotos.

Al menos se comió fruchetta.

Sistema: Depurando...

Laura anda ocupada, tanto que ya ni tiempo le queda para actualizar el blog, quién lo creyera, pero sí, finalmente ganó la responsabilidad, bueno, no en este instante porque, claro, siempre habrán algunos minuticos para escribir cualquier bobada (lo que faltan son las ganas cuando uno llega a la casa pensando únicamente en meterse en la cama), sobre todo cuando a la PCR todavía le quedan como 40min, ya son las 5:29pm y el laboratorio se siente vacío. Sí, la sensación de vacío sí es posible, pero sólo cuando quedan 5 (o menos) gatos embatados dedicados a sus labores particulares.

No reniego para nada de esta vida que escogí, no me malentiendan pero, cuando logro salirme de mi mundo y vernos con los ojos ignorantes de otros, pienso que nuestro trabajo no parece uno como tal. Ya un atrevido me escribió que lo que yo hago él lo podía montar en la cocina de su casa, obviamente yo me quedé pensando en cómo sería una cocina como ésa y quedé con ganas de tener una, les juro que de una así nadie me saca, sería feliz encerrada por horas haciendo experimentos, vestida de blanco, con guantes de cirugía pero sin escalpelo ni paciente, y, seguramente, con unas ganas implacables de rascarme la nariz que llegan simplemente por la imposibilidad de hacerlo.

Sí, Laura anda ocupada y todavía no está ni en la mitad del proyecto cuando apenas faltan 3 meses para sustentar. Laura está sufriendo del mal de todo tesista, la falta de tiempo, que no se preocupe, le dice hasta la mismísima jefe, pero claro, ella no puede hallar la calma cuando, además, tiene que planear su futuro, asumiendo que se logra graduar sin contratiempos. Claro que ya ha entrado en crisis y ya ni un dulce bizcocho la salva del derrumbe de emociones encontradas.

Pero claro que sobrevivirá, lo que pasa es que está en su naturaleza armar video para quejarse y mejor aún si lo puede hacer en público… aunque sean pocos los que se enteren.

Bueno, y así pasaron los 40min de desparche en los que andaba, me voy a recoger mis tubitos, luego me meteré en el caótico sistema de Transmilenio (odio las horas pico) para, finalmente, llegar a casa a descansar... comeré gomas de osito.